El sodio aumenta el riesgo de padecer de hipertensión, que es una de las principales causas de enfermedades del corazón y apoplejías. El cloruro de sodio, mejor conocido como sal, es la principal fuente de sodio para la mayoría de la gente. Uno de cada 10 adultos cumple con la recomendación de una cucharadita de sal, señala el estudio de los CDC, pero sólo una de cada 18 de las personas que deberían consumir incluso menos, lo logra.
La mayoría de la sal ingerida proviene de comidas procesadas, la sal se encuentra más comúnmente en quesos, productos horneados y carnes.